En el mundo de la gastronomía argentina, algo que no puedes dejar de degustar durante tu visita a este país es de un buen asado.
Desde su preparación, la calidad, el sabor de la carne y la compañía de amigos mientras esperan a que sea la hora de comer, es uno de los rituales culinarios que predomina a lo largo y ancho del país que no puedes dejar de experimentar.
Comer carne en Buenos Aires
En cualquier rincón de la ciudad encontraras restaurantes donde puedes disfrutar de un rico asado, pero si tienes la oportunidad de reunirte en casa del algún amigo para preparar uno, esta opción es mucho mejor! Por lo general los argentinos se reúnen todos los domingos para disfrutar de una tarde agradable en espera de este delicioso ritual.
Cómo se hace el Asado
La forma tradicional de preparar el asado es colocando las piezas enteras de carne colgadas alrededor de un fogón de leña. Uno de los secretos de la parrilla argentina es su lenta cocción, lo cual evita que la carne se queme por fuera y quede cruda por dentro. Sin embargo, en la ciudad no hay mucho espacio para el despliegue de este tipo de asador (aunque la mayoría de los grandes y mejores restaurantes suelen tener uno así) por lo que se utilizan parrillas sobre las cuales se coloca la carne, estas cuentan con un mecanismo para subir o bajar la parrilla y así controlar el nivel de calor durante la cocción.
Entre los cortes de carne más populares están la tira de asado (costillas cortadas en tiras de 8 cm de ancho apróximadamente), el vacío (corte de la región abdominal), el bife de chorizo (corte unido al costillar) la bondiola y el cuadril, también se sirven achuras, entrañas, chinchulines, chorizos y mollejas. A diferencia de otros lugares del mundo, la carne no es condimentada más que con sal gruesa.
Acompañantes
¿Y con que acompañamos estos ricos cortes? Generalmente el asado es servido con pan, provoletas (queso provolone), vegetales asados enteros (morrón/pimentón, choclo/maíz, papas, cebollas, etc.), chimichurri (salsa elaborada con aceita, vinagre ajo, perejil, ají molido, cebollas de verdeo y otras especias) y/o una ensalada cruda (lechuga, tomate, cebolla y/o rúcula son los principales ingredientes).
Una vez lista la carne y cuando todos estén sentados en la mesa no olvides decir efusivamente “un aplauso para el asador!” para iniciar la ola de aplausos como agradecimiento por tan exquisito trabajo.